No existe mejor tratamiento intolerancia alimentaria que el seguir unas pautas claras para que convivir con una intolerancia a la lactosa sea un poco más fácil y se eviten situaciones incómodas o molestias en el intestino que pueden incluso causar problemas en la flora. Veamos unas sencillas pautas que serán de gran ayuda.

1) Lee todas las etiquetas

Como intolerante vas a tener que acostumbrarte a leer todas las etiquetas de los productos de tu cesta de la compra en busca de lactosa oculta. No te resultará complicado verla ya que actualmente, la ley obliga a que los alérgenos estén marcados en negrita. Con el paso del tiempo ya conocerás las marcas que puedes tomar, pero aun así deberás de comprobar cualquier producto nuevo.

2) Utiliza pastillas de lactasa

Si eres intolerante es porque tu organismo no produce suficiente cantidad de lactasa para digerir la lactosa de la leche. Pero puedes tomarla en forma de comprimidos o cápsulas. Tomándolos junto con la comida en las dosis adecuadas podrás disfrutar de un menú normal o de un postre especial sin preocuparte si tiene o no lactosa. Es la solución perfecta para una fecha especial o para cuando se come fuera de casa y se quiere tener una seguridad extra.

3) Cuida tu flora intestinal

Cuando eres intolerante a la lactosa es frecuente cometer errores, sobre todo al principio. También es frecuente que acabes consumiendo lactosa sin querer cuando comes fuera de casa, ya que a veces se incluye en alimentos donde no esperas encontrarla. Además de la lactasa que ya hemos comentado, es inteligente tomar un preparado probiótico antes de irse de viaje y durante todo el viaje para prevenir problemas debido a una ingesta accidental. También debes de consumirlos al menos dos o tres veces al año para asegurarte de que tu flora está fuerte y en buena forma incluso si has tenido diarreas u otros problemas.

4) Ten siempre a mano pastillas para la diarrea

Pocas cosas son más desagradables que consumir un alimento que contiene lactosa por error y comenzar a sufrir diarreas en lugares poco oportunos, como durante un viaje, en el trabajo o cuando necesitas estar fuera de casa durante mucho tiempo. Si a pesar de todas tus precauciones has consumido lactasa y te produce diarreas que no se detienen tras acudir al baño una o dos veces, toma una de estas pastillas que te ayudarán a recuperar la normalidad y poder continuar con tu actividad diaria.