Preparar oposiciones para servicio Andaluz de salud SAS es una de las salidas laborales que se plantean muchas personas que están preparando oposiciones. En principio, es posible pensar que se trata de un tipo de empleo al que querrán optar sobre todo andaluces, pero esto no es así.
Una de las ventajas de las oposiciones en Andalucía es la ausencia de idioma autonómico, como ocurre por ejemplo en Euskadi, Galicia o Cataluña entre otras. Por este motivo se presenta gente de cualquier punto de España que esté dispuesta a desplazarse para vivir en Andalucía en caso de que aprueben y obtengan una plaza.
Preparar varias oposiciones a un tiempo
Al no haber un idioma propio de la comunidad muchas personas aprovechan y preparan oposiciones para diferentes puntos de España aprovechando que hay partes comunes en los temarios. La parte relativa a la constitución o a las leyes de procedimiento administrativo son idénticas en cualquier comunidad y también en las oposiciones del estado.
A mayores, hay que estudiar las leyes comunitarias, especialmente las referidas al Estatuto de Andalucía y a las de su servicio de salud. Evidentemente, esto supone un esfuerzo a mayores para el opositor, pero también un aumento de las posibilidades de conseguir un puesto de trabajo para toda la vida, por lo que suele merecer la pena.
Además, es frecuente que las oposiciones no coincidan en el tiempo por lo que se puede aprovechar el tiempo que transcurre entre un examen en una comunidad y en otra para estudiar, precisamente, las partes que son diferentes.
Conseguir los temarios es importante
Una buena base es importante para poder opositar y la base la da el temario. Algunos opositores caen en el error de querer hacer sus propios temarios ya que se trata de estudiar leyes, pero finalmente se dan cuenta de que un buen temario trae exclusivamente las partes que entran en los exámenes y, además, ofrecen interesantes explicaciones cuando es necesario que sea así.
Los temarios para oposiciones son una inversión importante en dinero, pero también son una inversión en futuro y, aunque puedan cambiar un poco con los años, un temario bien elaborado tiene partes que valdrán para siempre porque hay leyes que prácticamente no han cambiado desde su elaboración.
En cualquier caso, una pequeña actualización bastaría para poder volver a usarlo. Además, una vez que apruebe, esa inversión habrá merecido totalmente la pena.