En su opinin, el estudio debera -al menos- captar la atencin de las autoridades sanitarias espaolas (donde el Ministerio de Industria s ha mostrado su beneplcito a esta fuente de energa). “Hay una corriente internacional de mucha preocupacin por los riesgos para la salud de los disruptores endocrinos, incluso a dosis muy bajas. La evidencia est ah, y cualquier actividad que aumente esos niveles es preocupante”, concluye.
En este sentido, ha dicho que a 31 de diciembre las cifras de las listas de espera, que presentarán desde su departamento, serán mejor que las presentadas en junio. Debido a la crítica de la oposición a este respecto, Sansaloni ha censurado que “o no se actualizan o no evolucionan” y ha reprochado que están realizando una “política de desgaste”.
-Ms que miedo, yo tengo mucho respeto. Hemos visto matanzas increbles. En estos pases la vida no vale nada. No cuesta matar. Cuando ests en un lugar de conflicto (casi todos), cada da te levantas con una sonrisa, porque ests vivo. Las noches son ms duras, porque es cuando aprovechan para atacar. Yo me despert un da con un kalashnikov que me apuntaba a la sien. Fue en 2008, durante un proyecto en Darfur (Sudn). Si les das lo que tienes, te dejan vivir. El Congo quiz sea el pas ms peligroso, porque no sabes de dnde te puede venir el enemigo. Hay demasiados grupos, intereses, recursos a explotar. Es el caos.
Desde el PSIB, han censurado que los presupuestos de esta Conselleria son “insuficientes e irreales” porque “sólo quieren controlar gasto y cumplir el objetivo de déficit” y, debido a esto, lo que provocarán “es más desigualdad y menos oportunidades” en este ámbito.
Según Santiago, esto supone un “apartheid sanitario” ya que a esto se le debe añadir la retirada de 20.000 tarjetas sanitarias y que se mantenga el copago. Por eso, ha dicho, “no defendemos este modelo en el que están orgullosos de privatizar un servicio público”.
-Cuando ves que la gente lo pasa tan, tan mal, que sufre tanto, se te remueve todo por dentro y la mezcla de sensaciones es tremenda: rabia, frustracin, impotencia, cansancio… Pero al final, sabes que si ests al lado de los que ms te necesitan, siempre vas a poder hacer algo por ellos, aunque sea testimonial. En una zona de Darfur tenemos un hospital al que el Gobierno no nos deja meter medicinas porque atendemos a los rebeldes. Es increble! Est situado en un sitio parecido a los Picos de Europa, con accesos imposibles. Es horrible cuando te llega alguien medio desangrndose y no puedes hacer nada. Pero a ellos les alivia saber que ests ah. Que aunque sea con lo mnimo, les vas a intentar ayudar y que les vas a escuchar y a ser amable. A la comunidad les das seguridad. Eso tiene un gran valor.