La hidratación: el gran aliado del deporte

Como todos sabemos, el agua es el principal componente en el cuerpo humano, crucial para la mayoría de procesos fisiológicos de las personas. Ahora que llega el buen tiempo, el calor se hace notar cada vez más y nuestro ritmo diario cambia: la gente se anima más a la hora de hacer deporte o salir a la calle. 

El ejercicio físico, junto con el calor, puede convertirse en un mal aliado si no contamos con una buena hidratación en nuestro organismo; aumentar la ingesta de la cantidad de líquidos para recuperar la pérdida de los mismos, así como complementarlo con sales minerales y nutrientes, debe ser crucial para poder disfrutar del deporte y de este tiempo sin ningún tipo de preocupación. Entre los síntomas de la deshidratación podemos encontrar una sensación de malestar generalizada así como dolor de cabeza o cansancio agudo. 

Uno de los principales consejos es no esperar a tener sed para beber agua. El hecho de tener la boca seca ya es un signo de deshidratación, por lo que a la primera señal hay que beber agua. Lo recomendable es ingerir alrededor de 9 vasos de agua durante el día. Un truco para hacerlo más llevadero para aquellas personas que no están tan acostumbradas a beber agua, es aprovechar las cinco comidas del día para beber un par de vasos en cada una de ellas. 

Si este último truco no te funciona o solo alcanzas a beber un vaso de agua en cada comida, debes saber que el agua también está presente en alimentos o bebidas, pudiendo aprovecharte también de sus distintos nutrientes. Algunos de estos alimentos o bebidas son los siguientes: 

 

  • Infusiones o tés: además de contar con buenísimas propiedades para la piel, la retención de líquidos o el cansancio, las infusiones y los tés se elaboran, la mayoría de veces, con agua. Está es una muy buena opción si quieres ingerir mayor cantidad de líquidos, ya que le aportan sabores muy agradables al agua.  

 

  • Frutas: la sandía, el melón o las fresas son algunas de las frutas con un alto contenido líquido. Por ejemplo, la sandía cuenta con un 92% de agua y las fresas con un 70%. Mientras que la sandía puede ayudarte a prevenir los cólicos musculares y proporcionar gran cantidad de potasio, las fresas pueden ayudarte a saciarte gracias a su alto contenido en fibra, además de ayudar a reducir la cantidad de azúcar en sangre.  

 

  • Verduras y hortalizas: alimentos como la lechuga tienen más de un 90% de agua, además de contener mucha fibra. Lo bueno de la lechuga es que se puede combinar perfectamente en cualquier comida, por lo que nos puede ayudar mucho en el camino de la buena hidratación. El pepino, la zanahoria o los guisantes también son una buena opción, ya que el porcentaje de agua que contienen supera en todos ellos el 80%. 

 

  • Zumos de frutos (naturales): perfectos para todas aquellas personas que no son muy proactivas a la hora de tomar piezas de frutas o platos de verduras en su estado natural. La combinación de varias frutas y verduras, como la sandía, junto a las fresas y hojas frescas de acelgas y unas gotas de limón, son una alternativa perfecta. Además de hidratarnos de una forma idónea, estaremos ingiriendo gran cantidad de nutrientes mientras disfrutamos de un zumo o licuado que está de vicio. Puedes combinar tus frutas o verduras favoritas como quieras y experimentar nuevos sabores. 

 

Eso sí, olvídate de los zumos procesados. La gran cantidad de azúcares y calorías que contienen te alejarán de tu cometido. Cuanto más natural, mejor. 

 

Como ves, no hay excusa para no hidratarse bien. Tienes a tu alcance infinitas posibilidades para aumentar la cantidad de agua que tomas y evitar en todo momento sufrir una fuerte deshidratación. Aunque las frutas, verduras y demás opciones que te hemos facilitado pueden ayudar mucho, no olvides que son un complemento a la ingesta de vasos de agua, y no una alternativa. Una buena combinación de ambos te ayudará no solo a tener un cuerpo bien hidratado, sino que te echará una mano contra la retención de líquidos y grasas. 

 

¡A beber agua se ha dicho! 

 

9 SÍNTOMAS DE LA DIABETES

 

Antes que nada debes saber que la diabetes es una enfermedad grave, incluso mortal si no se le da un tratamiento adecuado. Es por ello que es primordial realizarte una prueba de glucosa en un laboratorio de análisis clínicos si tienes la sospecha de padeces de esta.

 

La diabetes se produce porque en la sangre existe una gran cantidad de azúcar, esto se debe a que el páncreas deja de producir insulina, provocando una alta de glucosa en el torrente sanguíneo o resistencia a esta. Es condición es hereditaria, pero también puede aparecer por un estilo de vida sedentario, sobrepeso, mala alimentación, colesterol alto, estrés, fumar, etc.

 

Si sufres de alguno de los siguientes síntomas es recomendable te realices una prueba de glucosa en un laboratorio de análisis clínicos lo antes posible y agendes una cita con tu médico de confianza:

  1. Ganas frecuentes y excesivas de orinar. La orina es la forma en la cual nuestro cuerpo elimina el exceso de azúcar en la sangre.
  2. Mucha sed. Como consecuencia del punto anterior el cuerpo se deshidrata con mayor frecuencia, provocando una necesidad inminente de consumir más líquidos.
  3. Cansancio excesivo. La deshidratación y la incapacidad celular de recibir la glucosa que es fuente de energía, el cuerpo se agotada fácilmente, por lo que si sientes un cansancio inhabitual continuamente, aún después de haber dormido lo suficiente te recomendamos acudas a tu médico.
  4. Cambio de peso. En la diabetes tipo 1 es muy común observar una pérdida acelerada de peso ya que la insulina es la encargada de almacenar grasas y sintetizar las proteínas del organismo. Sin embargoen la diabetes tipo 2 suele ocurrir lo contrario observándose un sobrepeso, ya que el cuerpo presenta resistencia a la insulina.
  5. Hambre excesiva. El cuerpo pretender compensar la correcta absorción de la glucosa, solicitando al cuerpo ingresar más alimentos en busca de energía, sin embargo esta se desperdicia yendo directamente a la orina, provocando más hambre.
  6. Visión borrosa. El cristalino del ojo se inflama debido al exceso de glucosa disminuyendo la capacidad de foco.
  7. Mala cicatrización. Las células que se encargan de reparar los tejidos se ven afectados por el exceso crónico de glucosa en la sangre, así que es posible que las heridas no cierren adecuadamente o tarden más de lo habitual.
  8. El sistema inmunológico se encuentra alterado debido al mal funcionamiento celular, provocando mayor propensión a las enfermedades.
  9. Cetoacidosis diabética. Esta sucede cuando la glucosa sobrepasa los 500mg/dl, y es sumamente peligrosa ya que puede provocar coma diabético, ceguera o muerte. Los signos para detectarla son náuseas,confusión mental, dolor abdominal, confusión mental, vómitos, desmayo y dificultad respiratoria.

 

Actualmente existen unos pequeños aparatos llamados glucómetros que utilizan tiras reactivas para verificar el nivel de la glucosa en la sangre, sin embargo siempre es más recomendable un acudir al laboratorio de análisis clínicos la primera vez para eliminar la posibilidad de un resultado inexacto debido una mala calibración o descompostura del aparatito.

¿Qué necesitas para que tu bebé duerma seguro?

Qué necesitas para que tu bebé duerma seguro

La seguridad de los hijos es una de las cosas que más preocupa a los padres, sobre todo cuando sus hijos son bebés, debido a su fragilidad. Vamos a comentar una serie de consejos y normas básicas que os ayudarán a estar tranquilos mientras vuestro hijo o hija duermen.

Asegurarse de que la cuna cumpla las normas de seguridad

Antes de comprar una minicuna, es importante asegurarse de que cumpla todos los requisitos de seguridad para el bebé. La UNE EN 716 es la normativa de seguridad europea sobre cunas en la que encontramos las diversas especificaciones que debe cumplir. Por ejemplo, los bordes deben tener una altura mínima de 27,5 centímetros y la parte inferior debe ser acolchada para evitar que pueda hacerse daño.

Escoge un colchón de calidad

Existen una gran cantidad de colchones para bebes y debemos asegurarnos de escoger el que  mejor se adapte a las necesidades de nuestro hijo. Hay que tener en cuenta la firmeza, el material y las medidas a la hora de ir a comprarlo. Un factor muy importante también es que esté libre de agentes tóxicos o dañinos para la salud, en este sentido podemos buscar productos que cuenten con el certificado OEKO TEX.

El bebé debe dormir boca arriba

La postura del bebé es muy importante a la hora de dormir, debemos asegurarnos de acostarlos boca arriba para prevenir el síndrome de muerte súbita. Conseguir un buen descanso para nuestro pequeño ayudará a mejorar su desarrollo.

Mantén una temperatura media en la habitación

Además de contar con una buena seguridad, es necesario que las habitaciones de los bebéssean cálidas y acogedoras. Es importante que el bebé no pase frio ni calor mientras duerme para que disfrute de un sueño óptimo.

¿Qué es lo más importante para que vuestro bebé duerma seguro? ¡Compartid vuestras opiniones con nosotros!

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