Cuando se requiere realizar algún proyecto, una evolución o resolver algún problema que requiere de conocimientos especializados, siempre se recurrirá a un profesional en el área.
Si se necesita elaborar un plano de alguna casa se busca el servicio de un arquitecto, si se requiere resolver un conflicto legal se busca el servicio de un abogado, si se requiere arreglar un problema de electricidad se buscará un electricista y dependiendo de la necesidad encontraremos al profesional requerido.
Así mismo en la medicina, existe diversidad de especialistas. Doctores de medicina general, doctor cardiólogo, doctor pediatra etc.
Como toda evolución médica y luego del diagnóstico, el doctor determinar el tratamiento a seguir para curar y superar el episodio presentado. Ya sea con medicamentos, rehabilitación física, estimulación de los sentidos o combinación de algunas o todas que ayudarán al individuo a superar su malestar.
La salud es el estado óptimo: biológico, físico, psicológico y social (ambiente) de una persona, es la armonía de todos estos elementos. La alteración de alguno de ellos afecta la buena salud de la persona.
El especialista que estudia la conducta y la mente humana es el Psicólogo. El tratamiento siempre será la terapia psicológica.
Aceptar que se necesita ayuda
Lo importante para cualquier cura es aceptar y reconocer que se necesita ayuda. En el caso de la terapia psicológica no es porque la persona está loca o sienta que está perdiendo el sentido común.
El apoyo y opinión de un especialista será de gran ayuda para mejorar, cambiar o manejar aquello que la persona sienta que está fuera de control o sienta que no puede manejar.
Esta terapia busca estimular los pensamientos, los sentimientos, las sensaciones y conocimientos, del individuo para poder aplicarlos o en algunas ocasiones no los ha descubierto en su interior.
Entre los recursos de esta terapia es la comunicación: hablar, dibujar, escribir, actuar y cantar, donde la persona puede expresar y sacar a flote sus sentimientos.
Estas actividades buscan reforzar las cualidades y aptitudes de la persona, así como también descubrir o reconocer las que cree que carece.
La mente es muy poderosa y si no se mantiene una salud mental esto es el detonante de otras enfermedades ya que se perturba el buen funcionamiento del organismo.
No existe edad, ni género, estatus social, profesión ni nada para someterse a una terapia psicológica, todo el que necesite una, puede tener la oportunidad de recurrir y solicitar los servicios requeridos para el beneficio mental que se necesita.